Autor: Alejandro Perdigones
Fuente: tododisca.com
Hacer testamento es muy recomendable entre los ciudadanos que cumplen la mayoría de edad. Al tratarse de un documento asociado al fallecimiento, muchas personas sienten rechazo de su realización a edades tempranas. Sin embargo, hay que tener en cuenta que el testamento puede modificarse tantas veces como se quiera durante la vida.
Los expertos de ‘Testamenta‘ definen el testamento como «documento por el cual una persona decide cómo se reparten sus bienes y patrimonio a su muerte. Ahora bien, existen determinadas condiciones, requisitos y consecuencias que mucha gente desconoce». Entre otras cosas, es necesario resaltar que la disposición de los bienes de cualquier persona deben ajustarse a las limitaciones que establece la legislación.
El testamento no es un documento que se deba realizar de forma obligada por ley. Es decir, una persona puede vivir sin ningún tipo de inconveniente al no realizar testamento. Sin embargo, esto puede tener consecuencias a la hora de repartir su herencia entre sus potenciales herederos.
La realización de testamento siempre es recomendable. Por un lado, el testador tiene la posibilidad de definir cómo se repartirán sus bienes y sobre qué personas recaerá. Todo ello, respetando los límites legales marcados por el Código Civil.
Otra de las ventajas de hacer testamento es que ayuda a reducir el proceso de sucesión. Cuando una persona fallece sin haber dejado testamento, es habitual que se produzcan conflictos entre familiares. Además, si dicha persona no tiene herederos, al no hacer testamento, su herencia irá a parar a manos del Estado.
La repartición de una herencia siempre conlleva unos gastos asociados propios de este tedioso trámite. Además, algunas herencias también implican el pago de determinados impuestos para poder disfrutarla. El pago del Impuesto de Sucesiones y Donaciones puede variar en función de cada Comunidad Autónoma (CCAA). Así, hacer testamento puede contribuir a reducir los costes propios de la herencia para los herederos.
La no realización del testamento puede tener consecuencias. Primeramente, provocará que la herencia siga el procedimiento marcado por la normativa general. De esta forma, se debe realizar una sucesión intestada con la solicitud de la Declaración de Herederos. Todo ello, conlleva un mayor tiempo en la resolución de la herencia y un encarecimiento considerable del proceso.
Si bien, los expertos de ‘Testamenta‘ informan que el testamento es un documento que tiene la misma validez en toda España. No obstante, puede haber diferencias importantes en lo que indique la legislación foral en determinados territorios, como puede ocurrir en Aragón, País Vasco, Cataluña, Galicia, Islas Baleares y Navarra.
Supongamos que una persona realiza su testamento en Madrid y posteriormente se muda a vivir a Galacia. Si esta persona fallece en Galicia, el testamento realizado en Madrid seguirá teniendo validez, aunque deberá ajustarse a las disposiciones sucesorias de la Comunidad Autónoma de Galicia, que cuenta con un Derecho Civil particular. Para evitar inconvenientes de cualquier tipo, los expertos recomiendan suscribir el testamento en el territorio en el que se resida.