Autora: Lidia Orellana
Fuente: tododisca.com
Recibir algo en herencia va mucho más allá de que la persona fallecida disponga lo que nos quiere dejar. Es importante informarse de todos los trámites, para no tener problemas en el proceso que en ocasiones, puede estar sujeto a sanciones económicas si no cumplimos. En el caso concreto de los inmuebles, existen una serie de pasos administrativos a seguir y de impuestos a liquidar, antes de adquirir la propiedad por completo de manera legal.
Cabe recordar, que la herencia comprende todos los bienes, derechos y obligaciones de una persona que no se extingan por su muerte. Dentro del primer cupo, se incluyen lo que se conocen como bienes inmuebles o ‘bienes raíces’. Son aquellos que forman parte del terreno y que por lo tanto, no se pueden mover sin destruirlos o deteriorarlos. Es decir, tienen una posición fija y se mantienen siempre inmóviles en un mismo lugar.
Los bienes inmuebles en una herencia pueden ser las casas, pisos, garajes o cualquier bien inamovible que el fallecido tuviera y que forma parte del caudal hereditario. Debido a la complejidad para adquirir estos bienes, hay un procedimiento específico para poder heredarlos y que pasen a forman parte del patrimonio de los interesados sin problemas y ni complicaciones.
Quizás parece obvio, pero el primer paso para adquirir cualquier masa hereditaria que nos pertenezca, es aceptar la herencia. Es importante saber además, que hasta para esta primera parte es necesario realizar algunas gestiones. En primer lugar, solicitar el certificado de defunción del causante. Este documento será necesario durante todo el proceso de resolución de la herencia.
Además, debe solicitarse en certificado de últimas voluntades para conocer si existía testamento o no. En caso de existir testamento, la voluntad del causante estará clara en cuanto a si eres heredero o no. Sin embargo, en caso de que este no exista, habrá que certificar mediante el libro de familia u otro documento que acredite el parentesco, que se tiene derecho a heredar la vivienda por sucesión.
Otro de los pasos importantes a la hora de heredar una casa, es liquidar todos los impuestos. Hay que tener en cuenta, que este paso dependerá de la Comunidad Autónoma española en la que se encuentre el inmueble. No obstante, estos son los impuestos que debes liquidar:
Impuesto de Sucesiones. Este se paga en Hacienda y afecta a todo el patrimonio heredado. A menos que se pida una prórroga, debe liquidarse en los seis meses siguientes al fallecimiento.
Plusvalía municipal. Este impuesto hace referencia al valor que ha ganado la casa heredada desde el momento de la compra hasta el de la herencia. Debe pagarse ante el Ayuntamiento donde esté ubicado el inmueble. Igual que en el caso anterior, se dispone de seis meses desde el fallecimiento del causante para pagar.
Una vez liquidados los impuestos y redactado la escritura de aceptación de herencia, estos son los últimos pasos a seguir:
Registro de la propiedad. Aquí deberás inscribir la escritura y pagar las tasas correspondientes.
Catastro inmobiliario. Para cambiar la titularidad de la vivienda.
Cambiar la titularidad de los suministros. Para ello necesitarás tu DNI y el de la persona fallecida.